Preguntas y respuestas

Pregunta y respuesta forman un binomio conceptual ampliamente glosado a lo largo de la historia del hombre.

  • «Cuando no me ve nadie, como ahora, gusto de imaginar a veces si no será la música la única respuesta posible para algunas preguntas».[1]
  • «El sabio no es el hombre que proporciona las verdaderas respuestas; es el que plantea las verdaderas preguntas».[2]
  • «La esencia de la ciencia: pregunta algo impertinente y estás en el camino de la respuesta pertinente».[4]
  • «Quizá la existencia de una respuesta depende solamente de que se haga la pregunta adecuada».[6]
  • «Preguntadlo todo, como hacen los niños. ¿Por qué esto? ¿Por qué lo otro? ¿Por qué lo de más allá? En España no se dialoga porque nadie pregunta, como no sea para responderse a sí mismo. Todos queremos estar de vuelta, sin haber ido a ninguna parte. Somos esencialmente paletos. Vosotros preguntad siempre, sin que os detenga ni siquiera el aparente absurdo de vuestras interrogaciones. Veréis que el absurdo es casi siempre una especialidad de las respuestas».
  • «Preguntar, preguntar, preguntar. A todo el mundo le gusta que le hagan preguntas y a todos les agrada responderlas».[10]
  • «Solo comprendemos aquellas preguntas a las que podemos responder».[11]
  • «Yo no procuro conocer las preguntas; procuro conocer las respuestas».[12]

Citas por autor

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Oscar Wilde

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Página principal: Wilde
  • «La pregunta llega muchas veces terriblemente más tarde que la respuesta».[13]
  • «Las preguntas nunca son indiscretas. Las respuestas, a veces sí».[14][15][16]

Véase también

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Referencias

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  1. Albaigès (1997), p. 54. El concierto de San Ovidio
  2. Ortega (2013), p. 3721.
  3. Ortega (2013), p. 2274.
  4. Albaigès (1997), p. 81.
  5. Albaigès (1997), p. 40. The New York Times, 1978.
  6. Ortega (2013), p. 3408.
  7. Albaigès (1997), p. 541.
  8. Si la naturaleza es la respuesta, ¿cuál era la pregunta?. Tusquets, 2002. ISBN 9788483108475
  9. Machado, Antonio (1973 (5ª ed.). Juan de Mairena II. Losada. p. 18. 
  10. Albaigès (1997), p. 540.
  11. Palomo (2013), p. 237.
  12. Palomo (2013), p. 249.
  13. Ortega (2013), p. 3408.
  14. Dicho por el personaje Mistress Chevely en Un marido ideal. p. 51, Edaf 2007; ISBN 9788441402782.
  15. Albaigès Olivart la da erróneamente en boca de Noel Coward (tomada del Quatuor de 1955).
  16. Albaigès (1997), p. 540.

Bibliografía

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  • Albaigès, José María (1997). Un siglo de citas. Planeta. ISBN 8423992543. 
  • Ortega, Arturo. El gran libro de las frases célebres. Penguin Random House Grupo Editorial. México, 2013. ISBN 6073116314, 9786073116312. (En Google Books.)