Blaise Pascal

matemático, físico, inventor, escritor francés y filósofo cristiano
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Blaise Pascal
«El amor no tiene edad; siempre está naciendo».
«El amor no tiene edad; siempre está naciendo».
Véase también
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Blaise Pascal (19 de junio de 1623 – 19 de agosto de 1662) fue un científico, filósofo y aforista francés.

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  • «A fuerza de hablar de amor, uno llega a enamorarse. Nada tan fácil. Es la pasión más natural en el hombre».[1]
  • «Aquel que duda y no busca es, a la vez, sumamente desgraciado y sumamente injusto».[2][3]
  • «Burlarse de la filosofía también es filosofar».[4][5]
  • «Cuando me he puesto a considerar algunas veces las diversas agitaciones de los hombres y los peligros y las penas a que se exponen en la corte, en la guerra, de donde nacen tantas querellas, pasiones, empresas audaces y con frecuencia malas, etc., he descubierto que toda la desgracia de los hombres viene de una sola cosa: el no saber quedarse tranquilos en una habitación».[6]
  • «Cuando no se ama demasiado no se ama lo suficiente».[7]
  • «Cuanto más talento tiene el hombre más se inclina a valorar el ajeno».[8]
  • «Debemos creer, no por las pruebas, sino por convencimiento».[9]
  • «El amor no tiene edad; siempre está naciendo».[10][11]
  • «El estornudo absorbe todas las funciones del alma».[13]
  • «El hombre es una caña pensante».[14] o «El hombre no es más que una caña, la más frágil de la naturaleza, pero es una caña que piensa».[15]
  • «El pasado y el presente son los medios, nuestra meta es el porvenir».[16]
  • «El primer efecto del amor es el de inspirar un gran respeto. Se siente veneración por el objeto amado».[17]
  • «El silencio eterno del espacio infinito, me asusta».[18]
  • «El universo es una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna».[19][20]
  • «En el mundo reina la fuerza y no la opinión; pero es la opinión quien manipula la fuerza».[22]
  • «Es más fácil soportar la muerte sin pensar en ella, que soportar su pensamiento sin morir».[23]
  • «Existen tres maneras de creer: la razón, la costumbre y la inspiración».[24]
  • «Falsa humildad, orgullo».[25]
  • «La conciencia es el mejor libro moral que tenemos, y el que se debe consultar más amenudo».[26]
  • «La elocuencia es una pintura del pensamiento».[27][28]
  • «La naturaleza tiene perfecciones para demostrar que es imagen de Dios e imperfecciones para probar que sólo es una imagen».[29]
  • «La razón actúa con lentitud, y con tantos miramientos, que se embota o se pierde en todo instante si no tiene siempre presentes todos sus principios. El sentimiento no actúa así: actúa instantáneamente, y está siempre presto a actuar».[30]
  • «La virtud de un hombre no debe medirse por sus esfuerzos, sino por lo que hace ordinariamente».[31]
  • «Las ciencias tienen dos extremos que se tocan. El primero es la pura ignorancia natural en que se encuentran todos los hombres al nacer. El otro, aquel a que llegan las almas grandes que, habiendo recorrido todo lo que los hombres pueden saber, encuentran que no saben nada, y se encuentran en esa misma ignorancia de donde partieron; pero es una docta ignorancia que se conoce a sí misma».[32]
  • «Los extremos se tocan».[33]
  • «Los ríos son senderos que andan y que nos llevan a donde queremos ir».[34][35]
  • «Lo visible, en su totalidad absoluta, no es más que un trazo imperceptible en el vaso seno de la naturaleza universal».[36]
  • «Muy débil es la razón si no llega a comprender que hay muchas cosas que la sobrepasan».[37]
  • «Nada aburre más que la continua elocuencia».[38]
  • «Nadie habla de nuestra presencia del mismo modo que en nuestra ausencia. La sociedad humana está fundada en este mutuo engaño».[39]
  • «No es cierto que todo sea incierto».[40]
  • «No me buscarías si no me hubieses encontrado».[41]
  • «Nos persuaden mejor las razones que uno ha encontrado por sí mismo que las encontradas por los demás».[42]
  • «Nuestra imaginación nos agranda tanto el tiempo presente, que hacemos de la eternidad una nada, y de la nada una eternidad».[43]
  • «Que cada uno examine su pensamiento, y le hallará siempre ocupado del porvenir».[44]
  • «Todas las buenas máximas están en el mundo; sólo hace falta aplicarlas».[45]
  • «Todas las desgracias del hombre provienen de no saber estarse quieto en casa».[46]
  • «Todo lo que es incomprensible -a pesar de ello- no deja de ser».[47]
  • «Una de las principales enfermedades del hombre es su inquieta curiosidad por conocer lo que no puede llegar a saber».[48]

Citas sobre Pascal

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  • «Pascal escribió que "todas las desgracias del hombre vienen de una sola, que es no saber permanecer quieto en una habitación". Se equivocaba por completo. La felicidad viene más bien de haber tenido la fortuna de estar en varias estancias y de sucesivamente haber podido ir abriendo desde ellas ventanas a la realidad».[49]

Referencias

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  1. Pascal (2012). [1]
  2. Palomo (2013), p. 103.
  3. Pascal (1940), Sección III, 194.
  4. Bartra (1994), p. 235.
  5. Orbaneja, Eduardo (1998). El saber del pueblo. Establecimiento tipográfico de J. Pastor, Valladolid, 1890. CIE. p. 405. ISBN 8493001643. 
  6. Pascal (1940), Sección II, 139.
  7. Palomo (2013), y Pascal (2012) p. 31.
  8. Ortega (2013), p. 3934.
  9. Palomo (2013), p. 80.
  10. Señor (1997), p. 44.
  11. Ortega (2013), p. 261.
  12. Pascal (1940), Sección III, 177.
  13. Bartra (1994), p. 235.
  14. Bartra (1994), p. 234.
  15. Ortega (2013), p. 3143.
  16. Señor (1997), p. 513.
  17. Pascal (2012).
  18. Bartra (1994), p. 235.
  19. Pensees (frg. 199). Citado en Blaise Pascal: La certeza y la duda, por Francisco Diez del Corral; Visión Libros; pág. 13 isbn 8490117411.
  20. D. R. C. (1858), p. 160.
  21. Bartra (1994), p. 235.
  22. Palomo (2013), p. 216
  23. Palomo (2013), p. 201-3
  24. Bartra (1994), p. 235.
  25. Pascal (1940), Sección III, 257.
  26. D. R. C. (1858), p. 46.
  27. Pascal (1940), Sección I, 26.
  28. D. R. C. (1858), p. 82.
  29. Palomo (2013), p. 208.
  30. Pascal (1940), Sección III, 252.
  31. D. R. C. (1858), p. 242.
  32. Pascal (1940), Sección IV, 327.
  33. Bartra (1994), p. 235.
  34. Bartra (1994), p. 235.
  35. Citado por Gómez de la Serna, Ramón. Total de greguerías. Aguilar, 1961. p. 39. ISBN 9788422657279. 
  36. Bartra (1994), p. 235.
  37. Palomo (2013), p. 242.
  38. Bartra (1994), p. 235.
  39. Ortega (2013), p. .
  40. Bartra (1994), p. 235.
  41. Bartra (1994), p. 235.
  42. Ortega (2013), p. 3536.
  43. Pascal: Escritos escogidos. Ed. Océano, 2016; contexto. ISBN 9786077351450
  44. D. R. C. (1858), p. 186.
  45. Señor (1997), p. 353.
  46. Bartra (1994), p. 235.
  47. Bartra (1994), p. 235.
  48. Palomo (1997), p. 84.
  49. Me morí el 28 de febrero. Publicado en El País del 2005/02/13

Bibliografía

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  • D. R. C. (1858). Tesoro de la sabiduria de todos los siglos y paises: sentencias, pensamientos, máximas y dichos memorables de los sabios y hombres celebres. El Libro de Oro, Madrid. En Google Libros
  • Pascal, Blaise; trad, Raúl Falcó (2012). Discurso acerca de las pasiones del amor y otros opúsculos. Fondo de Cultura Economica. ISBN 6071609232, 9786071609236. En Google Libros