Proverbios indios

artículo de lista de Wikimedia

Proverbios, refranes y dichos de origen indio (la India, Asia)

editar
  • «Allí donde reina el miedo al tigre, se hace de noche».[1]
  • «Allí donde una uña es suficiente no utilices un hacha».[2]
  • «Al perezoso, las deudas le caen sobre los bigotes, sin que se decida a llevárselas a la boca».[3]
  • «Aunque seas rey, ten en cuenta que no eres más que el hijo de tu madre».[2]
  • «Confía en los grandes, pero no te aproximes a ellos jamás».[4]
  • «Cree con una oreja, y desconfía con la otra».[2]
  • «Cubre tu cólera con tu alegría al gigual que el lago tranquilo oculta al caimán».[1]
  • «Desde el momento en que las letras del destino son grabadas en tu frente, el destino no te abandonará, auque te cortes la cabeza».[4]
  • «El árbol acoge bajo su follaje al hombre que lo abatirá».[2] o «El árbol no niega su sombra ni al leñador».[5]
  • «El arroz en la cuchara, no ha llegado todavía a la boca».[2]
  • «El bien que hicimos la víspera es es que nos trae la felicidad por la mañana».[6]
  • «El cielo beneficia a la tierra con la lluvia; pero la tierra no le devuelve más que polvo».[7]
  • «El cuervo no se convierte en cisne aunque se bañe en el Ganges».[8]
  • «El diablo murmura al oído de cada uno de nosotros: “Nadie es igual”».[4]
  • «El día del Juicio, la pluma del sabio pesará tanto como la espada del conquistador».[9]
  • «El hombre ambicioso perece con sus deseos».[2]
  • «El jactancioso que muere, no puede volver a la vida».[3]
  • «El justo debe imitar al bosque de sándalo, que perfuma al hacha que lo lastima».[5][10]
    • Tagore lo reescribre así: «El hacha del leñador le pidió al árbol el mango, y el árbol se lo dió».[5]
  • «El que dice mío es un demonio».[11]
  • «En el árbol al que no se puede subir hay ocho mil frutos».[1]
  • «En soledad, no es bueno reir ni llorar».[2]
  • «En un pequeño vaso no hay ni Oriente ni Occidente».[2]
  • «Grandes palabras, pero en pequeña medida».[4]
  • «Habla, para que yo te conozca».[4]
  • «La amistad entre los hombres que de verdad se estiman es como la luna nueva, que crede a medida que las noches pasan».[4]
  • «La coqueta es como la sombra; seguidla y ella huirá de vos; huidla y os perseguirá».[12]
  • «La envidia de un enemigo es su propio castigo».[4]
  • «La espada, el enemigo y la serpiente hacen menos mal que la desmesura del alma».[2]
  • «La falsa amistad es como un banco de arena».[4]
  • «La mano del Brahman y la trompa del elefante no conocen el descanso».[2]
  • «La mujer del soldado es siempre una viuda».[4]
  • «La perla no tiene ningún valor mientras permanece en su concha».[2]
  • «La riqueza es como árbol a la orilla de un río».[13]
  • «La suerte y la mala suerte son dos cubos dentro del mismo pozo».[2]
  • «Los pájaros se cazan por las patas. Los hombres, por las palabras».[14]
  • «Nadie puede ver su propia espalda».[2]
  • «No es con la mano con lo que atraparás el tiempo».[4]
  • «No te pongas nunca delante de un juez ni detrás de un caballo».[2]
  • «Para responder al diablo, utiliza su idioma».[4]
  • «Para una hormiga, un vaso de agua es un océano».[15]
  • «Podrán pesarse los granos de arena, pero es imposible pesar el corazón».[1]
  • «Quien es prudente nunca dice sus pensamientos a otro, antes de haber conocido los de éste».[3]
  • «Quien invite a un ciego recibirá dos huéspedes».[2]
  • «¿Quien se ha detenido jamás en los límites del deseo?».[1]
  • «Si comes polvo, cómelo en secreto».[2]
  • «Si los elefantes pelean, el mulo muere entre sus patas».[2]
  • «Si maldices a alguien, prepara dos tumbas».[2]
  • «Si quieres adquirir conocimientos, hazte el ignorante».[2]
  • «Una conciencia culpable es como un enemigo vivo».[2]
  • «Un corazón alegre es como un filtro que filtra oro».[2]
  • «Un diamante aunque tenga defectos es preferible a una simple piedra que no tenga ninguno».[16]
  • «Un discurso adulador es como un dulce veneno».[4]

Ver también

editar

Referencias

editar
  1. 1,0 1,1 1,2 1,3 1,4 Acerete (1967), p. 122.
  2. 2,00 2,01 2,02 2,03 2,04 2,05 2,06 2,07 2,08 2,09 2,10 2,11 2,12 2,13 2,14 2,15 2,16 2,17 2,18 2,19 2,20 2,21 Acerete (1967), p. 230-3.
  3. 3,0 3,1 3,2 Acerete (1967), p. 136-7.
  4. 4,00 4,01 4,02 4,03 4,04 4,05 4,06 4,07 4,08 4,09 4,10 4,11 Acerete (1967), p. 308.
  5. 5,0 5,1 5,2 Señor (1997), p. 118.
  6. Señor (1997), p. 78.
  7. Orbaneja (1988), p. 359.
  8. Acerete (1967), p. 37.
  9. Orbaneja (1988), p. 359.
  10. Orbaneja (1988), p. 359.
  11. Orbaneja (1988), p. 359.
  12. Orbaneja (1988), p. 359.
  13. Acerete (1967), p. 107.
  14. Bartra (datos.bne). Frases y citas célebres. Grijalbo. p. 12. ISBN 8425315263. 
  15. Acerete (1967), p. 37.
  16. Orbaneja (1988), p. 359.

Bibliografía

editar
  • Acerete, Julio C. (1967 1.ª ed.). Proverbios, adagios y refranes del mundo entero. Bruguera. 
  • Orbaneja, Eduardo (1998). El saber del pueblo. Establecimiento tipográfico de J. Pastor, Valladolid, 1890. CIE. ISBN 8493001643. 
  • Señor, Luis (1ª ed. 1997 / 2017). Diccionario de citas. Espasa Calpe. ISBN 8423992543.