Manuel Bartolomé Cossío
pedagogo e historiador del arte español
Manuel Bartolomé Cossío | |||||||||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
«La reforma legal sólo puede sostenerse y afianzarse sobre la reforma del corazón» |
|||||||||||
Véase también | |||||||||||
Biografía en Wikipedia. | |||||||||||
Multimedia en Wikimedia Commons. | |||||||||||
Datos en Wikidata. | |||||||||||
Esta página contiene citas de una persona fallecida hace 89 años. | |||||||||||
Manuel Bartolomé Cossío (Haro, La Rioja, 22 de febrero de 1857 – Collado Mediano, Madrid, 2 de septiembre de 1935) fue un pedagogo krausista e historiador del arte español, sucesor de Francisco Giner de los Ríos en la dirección de la Institución Libre de Enseñanza.[1]
Citas
editar- «Cada cual tiene la obligación de hacer de su vida un arte».[2]
- «Clamamos a los cuatro vientos sin enemistad hacia nadie, ni contra los jesuitas, ni contra los masones, católicos, protestantes, ateos, sino contra los haraganes, sean republicanos, liberales, conservadores o carlistas, que por igual se encogen de hombros ante la educación del pueblo y los intereses culturales».[3]
- «El mundo entero debe ser, desde el primer instante objeto de atención y materia de aprendizaje para el niño, como lo sigue siendo, más tarde para el hombre. Enseñarle a pensar en todo lo que le rodea y a hacer activas las facultades racionales es mostrarle el camino por donde se va al verdadero conocimiento, que sirve después para la vida. Educar antes que instruir ; hacer del niño, en vez de un almacén, un campo cultivable».[4]
- «El primer material de enseñanza; el adecuado en todo caso, el que está siempre vivo, el que no se agota jamás, es la realidad misma, que generosamente se nos ofrece». [5]
- «La reforma legal sólo puede sostenerse y afianzarse sobre la reforma del corazón».[6]
Citas sobre Manuel Bartolomé Cossío
editar- «Cossío, como su amigo y maestro don Francisco Giner, era hombre de espíritu franciscano. Tendían, tanto el uno como el otro, en un país como el nuestro, áspero y de dogmatismos violentos, hacia una obra de paz. Ninguno de ellos tenía un sistema único y cerrado de filosofía o de pedagogía. Eran hombres más bien de una tendencia al sincretismo, que pensaban y querían aprovechar diversas teorías y principios en un sentido pragmatista».[8]
- «Para mí, por otra parte, y considerándolo como elogio, los hombres de la generación de Cossío y de otras posteriores que descollaron en la vida intelectual y artística, dentro de cauces parecidos, fueron hombres de una ingenuidad enorme, en un país de gente astuta, ya que no inteligente. Se dieron cuenta de muchas lacras y lacerías, pero juzgaron que había fórmulas generales o particulares para sanar de ellas. Creyeron en la Pedagogía, en la Ciencia, en el Arte. Creyeron incluso en la virtud de los cambios políticos. Acaso conocieron menos a los españoles o a cantidad de ellos.
Su misma preparación, su misma formación moral, los aislaba, hasta cierto punto, de amplios sectores que, por su parte, tenían de ellos (o fingían tener) una idea falsa en absoluto».[9]
- «Sí, aquí está ya con sus ojos, las manos de molino en el cielo, fresca la mirada —recuerdo una marina crepuscular del Norte igual a Cossío; marina nubosa, noblemente colorida, con un barco encallado en la costa, agua y cielo trocados, en cuya revolución vigilaba, tranquilo, un lucero—. Se yergue, como un lirio doblado, con una agua nueva —tiene mucho Cossío de tierno vegetal y de rico mineral; pocos hombres me han parecido tan paisaje—. ¡Aquí está ya, dueño de la idea radiante, el ángel anunciador de la gran ala, cogido por un pie!».[10]
Referencias
editar- ↑ Otero Urtaza, Eugenio M., Manuel Bartolomé Cossío: trayectoria vital de un educador(1994); portal CSIC. Página 41. [1]
- ↑ Manuel Cossío, convertir la vida en arte", por Andrés Seoane, en El Cultural del 01.12.2016
- ↑ Dicho en 1915. González Ruiz, Juan: «Don Francisco Giner de los Ríos: Un soñador para la escuela.» Cabás n.º 14; ISSN 1989-5909, páginas 1-15. Citado en línea: revista.muesca.es
- ↑ Boletín de la Institución Libre de Enseñanza. Año III, núm. 65 (31 octubre 1879); pp. 153-154. Biblioteca de la Universidad Complutense de Madrid.
- ↑ Bartolomé Cossío (1910). Congrés International de l'Education Populaire (Bruxelles. 1910); organisé par la Ligue Belge de l'Enseignement. Bruxelles:(s.n.), 1910 (Imprimerie du Profes. V. Feron) 305 p. 23. CSIC-Residencia de Estudiantes. Consultado el 19 de marzo de 2019.
- ↑ Dicho en 1900. Citado por Carbonell Sebarroja, Jaume. Una antología pedagógica. Ministerio de Educación y Ciencia, 1985. ISBN 9788436912616. Página 11.
- ↑ Bartolomé Cossío (1882). Conclusiones relativas a los temas discutidos en el Congreso Pedagógico y presentadas al mismo por los profesores de la Institución que la suscriben: Rafael María de Labra, Gumersindo de Azcárate, Francisco Giner, José de Caso, Joaquín Costa, Joaquín Sama, Manuel B. Cossío, José Lledó, Germán Flórez. En: Boletín de la Institución Libre de Enseñanza. Año VI, n.º 128 (17 de junio de 1882); pp. 125-126. Biblioteca Instituto Padre Sarmiento. Consultado el 19 de marzo de 2019.
- ↑ «La muerte de don Manuel B. Cossío.» La Voz (entrevista de redacción a don Pío Baroja, Madrid, 2 de septiembre de 1935, p. 12 y reproducida en otros periódicos). En línea:
- ↑ Caro Baroja, Julio: «El hombre y el educador que fue Cossío.» En: VV. AA. Un educador para un pueblo, Prólogo, Madrid, UNED, 1987.En línea.
- ↑ Otero Urtaza, Eugenio M. Bartolomé Cossío. Pensamiento pedagógico y acción educativa. Ministerio de Educación y Ciencia, 1994. ISBN 9788436925343. Página 55.
Bibliografía
editar- Álvarez Santullano, Luis: El pensamiento vivo de Cossío, Buenos Aires, Editorial Losada, 1946.
- Jiménez-Landi, Antonio: Manuel B. Cossío. Una vida ejemplar (1857-1935), Alicante, Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, 1989.
- Jiménez-Landi, Antonio: Semblanza humana de Manuel B. Cossío, Santander, Taller de Artes Gráficas de Gonzalo Bedía, 1984.
- Xirau Palau, Joaquín: Manuel B. Cossío y la educación en España Colegio de México, 1945.