Arturo Pérez-Reverte

Arturo Pérez-Reverte
Véase también
Biografía en Wikipedia.
Multimedia en Wikimedia Commons.
Datos en Wikidata.
Esta página contiene citas de una persona actualmente viva.
	Dependiendo de cómo se publicaran, pueden estar protegidas por derechos de autor. Deben usarse según las políticas de licencias de Wikiquote.

Arturo Pérez-Reverte (Cartagena, Murcia, 25 de noviembre de 1951) es un novelista y periodista español.

Citas de entrevistas o de sus libros

• «Cada cual tiene el diablo que se merece».

• «Cádiz es un símbolo de la España que pudo ser, que estuvo a punto de ser, que pudimos haber tenido, y que por muchas razones no pudo ser nunca».

• «Creo que la Humanidad se divide básicamente en dos clases de personas: las que saben que van a morir, y las que prefieren no saberlo».

• «En literatura, el tiempo es un naufragio en el que Dios reconoce a los suyos».

• «Es un error grave mirar al pasado con los ojos del presente».

• «La Historia demuestra que la razón es de quien tiene el coraje de sostenerla».

• «Los medios igual que hacen el mayor bien cuando denuncian la injusticia, también hacen el mayor mal cuando, atentos al libro de estilo de lo políticamente correcto, manipulan la realidad. Reproducen lo que es la sociedad y luego la sociedad se retroalimenta de ellos. Lo peor es que hoy no existe el espíritu crítico que hubo en España desde finales del siglo XIX hasta la II República».

• «Ser español y lúcido aparejó siempre una seca soledad».

• «Sin cultura (me refiero a cultura de verdad, a educación y a lucidez) no hay futuro posible. Los pueblos incultos, sobre todo los deliberadamente incultos, tienen un futuro problemático».

• «Sin Historia no hay posibilidad de acometer el presente. No te puedes mover por el presente, no puedes actuar en él. Conocer la Historia, sus mecanismos de análisis, de comprensión, te da la sabiduría del tablero. ¿Cómo te atreves a moverte sin saber las reglas del ajedrez?».

Digresiones personales

• «Cuando Héctor o Aquiles no tienen la suerte de morir en Troya, se convierten en Ulises intentando regresar a Ítaca bajo un cielo sin dioses, y llamándose Nadie para sobrevivir en la cueva del cíclope. Cualquier imbécil puede ser Héctor o Aquiles. Lo difícil es ser Ulises con una Troya ardiendo en la memoria. Ése es el héroe que me interesa, y con él escribo novelas. Quizá porque a mi edad soy más Ulises que Aquiles y yo también tengo sangre en las uñas y alguna Troya ardiendo a las espaldas. En realidad, todas mis novelas hablan sobre lo mismo: sobre ese Ulises, hombre o mujer, moviéndose por territorio hostil. Por territorio enemigo».

• «Soy anti-inclusivo radical por defensa propia».