Diferencia entre revisiones de «Laurence Sterne»

Contenido eliminado Contenido añadido
JuanToño (discusión | contribs.)
JuanToño (discusión | contribs.)
Línea 23:
<!-- Agregar las citas en orden alfabético con su fuentes y referencias con los requisitos que piden las políticas oficiales. Sin ellas cualquier editor puede borrarlas, por lo que se perderá tu aportación. El uso de bases de datos de citas de Internet está prohibido por la política oficial de referencias aprobada por la comunidad. -->
 
* "«La ciencia se puede aprender de memoria; la sabiduría, no"».{{fuentes}}
 
* "«El afán de conocimiento, como la sed de riquezas, aumenta siempre con su adquisición"».{{fuentes}}
* "La muerte abre las puertas de la fama y cierra tras de sí las de la envidia".
 
* "Cuando la temeridad tiene éxito, pasa a llamarse heroísmo".
* "«La muerte abre las puertas de la fama y cierra tras de sí las de la envidia"».{{fuentes}}
* "Lo que se llama perseverancia en una buena causa, se dice obstinación en una mala".
 
* "Es más provechoso en este mundo recibir favores que hacerlos. Tomad, como ejemplo, un brote que se está marchitando, plantadlo en la tierra, y enseguida tendréis que regarlo, pues lo habéis plantado".
* "«Cuando la temeridad tiene éxito, pasa a llamarse heroísmo"».{{fuentes}}
* "Con respecto a los curas... — No, si digo algo en su contra, me dispararán. — No albergo deseo alguno — y además, si lo albergara no me atrevería, por la salvación de mi alma, a tocar el tema, con un ánimo y nervios tan débiles, y en mi actual condición, sería tanto como vale mi vida, el desalentarme y constreñirme con tan absurda melancolía, y por tanto, es mucho más seguro correr la cortina y alejarme de ella, tan rápido como pueda, al punto principal y central que he decidido aclarar, esto es, cómo ha podido ocurrir que los hombres de menor ingenio sean considerados como los hombres del mayor de los juicios".
 
* "«Lo que se llama perseverancia en una buena causa, se dice obstinación en una mala"».{{fuentes}}
 
* "«Es más provechoso en este mundo recibir favores que hacerlos. Tomad, como ejemplo, un brote que se está marchitando, plantadlo en la tierra, y enseguida tendréis que regarlo, pues lo habéis plantado".
* "«Con respecto a los curas... — No, si digo algo en su contra, me dispararán. — No albergo deseo alguno — y además, si lo albergara no me atrevería, por la salvación de mi alma, a tocar el tema, con un ánimo y nervios tan débiles, y en mi actual condición, sería tanto como vale mi vida, el desalentarme y constreñirme con tan absurda melancolía, y por tanto, es mucho más seguro correr la cortina y alejarme de ella, tan rápido como pueda, al punto principal y central que he decidido aclarar, esto es, cómo ha podido ocurrir que los hombres de menor ingenio sean considerados como los hombres del mayor de los juicios".
** Libro III, capítulo 20.